Iglesias en español se extienden por el centro de Kentucky
Cuando la inmigrante Victoria Corona se mudó al centro de Kentucky a inicios de la década de 1990, no había una sola iglesia en español. Cuando ella encontró una un tiempo después, toda la congregación sumaba apenas cuatro creyentes.
Ahora, una década y media después, hasta 200 personas asisten cada domingo por la mañana a la congregación pentecostal Iglesia Puerta del Cielo, en Lexington.
Entre sus miembros hay lavaplatos y empleadas de aseo doméstico, ayudantes en negocios de caballos, dueños de pequeños negocios y una abogada que está ahorrando dinero para abrir su propia oficina en México.
Aproximadamente el 80 por ciento de los miembros hispanos de Puerta del Cielo son nativos de México, pero también hay inmigrantes de otras siete naciones latinoamericanas.
El pastor bilingüe Alberto Carrillo, nacido en Ecuador, es quien dirige la joven congregación religiosa.
Carrillo ayuda a sus fieles no sólo como guía espiritual, sino también como asistente social y traductor. Ha ayudado a sus fieles con problemas de inmigración, incluso recaudando dinero para pagar la fianza de algún miembro que ha sido arrestado por alguna infracción de tránsito.
Además de esa iglesia hay más de una veintena de congregaciones formadas principalmente por latinos, que luchan entre sí por atraer a los fieles. La más exitosa ha sido la iglesia Puerta del Cielo, que pertenece a la denominación Asambleas de Dios.
En la última década, el número de latinos que pertenecen a la denominación casi se ha duplicado.
En 1995, las Asambleas de Dios tenían 2,4 millones de miembros, incluyendo 275.796 hispanos. Para 2005, sus integrantes sumaban 2,8 millones, incluyendo a 522.054 hispanos.
Efraín Espinoza, director de la Oficina de Ministerios Hispanos de la denominación en Springfield, Misuri, dijo que Puerta del Cielo es la iglesia en español más vieja y más grande de las Asambleas de Dios en Kentucky.
El éxito de la congregación es parte de una tendencia nacional, agregó Espinoza en declaraciones al diario Lexington Herald-Leader.
«Las Asambleas de Dios están experimentando un crecimiento fenomenal entre los hispanos», dijo. «No es ninguna aberración. Es un patrón que hemos visto».
Univisión
