Impacto y crecimiento en las islas canarias
La iglesia “Jesús 100 % Vida” experimenta un continuo crecimiento y testimonio cristiano en esta importante ciudad de las Islas Canarias, hecho que ha sido evidenciado en semanas recientes luego de la celebración del bautismo de nuevos miembros, la consolidación del liderazgo y los ministerios, el desarrollo de nuevas células familiares y la consagración de un nuevo templo al servicio del Señor.
-“Todo era un sueño cuando comenzamos la obra hace cuatro años atrás” – señaló Daniel Báez, pastor de esta pujante congregación canaria – “El Señor nos ha sorprendido día a día, de modo que hoy se han multiplicado nuestras posibilidades de evangelización integral hacia la transformación de nuestra sociedad”.
Cuando el pastor Báez y su esposa Mirian arribaron a esta ciudad junto a su familia lo hicieron acompañados de la visión de crecimiento y evangelización que habían recibido en su congregación de origen, la iglesia “Jesús 100 % Vida” de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. –“Llegamos con propósitos laborales” – añadió Báez – “y con un profundo deseo de compartir el mensaje del Evangelio con todos aquellos con quienes nos relacionáramos”.
En un país cuyas características no siempre han permitido evidenciar un crecimiento evangélico notorio, el matrimonio Báez se propuso creer y movilizarse en fe en base al consejo que habían escuchado tantas veces de parte del pastor Rubén Kassabián, fundador de “Jesús 100 % Vida”: -“No hay ningún corazón duro para el Señor, no hay ningún país ni cultura que no puedan ser transformados positivamente por el amor de Jesucristo”.
En tan sólo cuatro años de vida la congregación canaria cuenta con un plantel de 30 líderes y una membresía de 130 personas que se congregan durante la semana en las denominadas “células familiares” como así también en los cultos dominicales. En días recientes se llevó a cabo el bautismo de 16 hermanos y hermanas, y el trabajo en pos de la acción social evangelizadora crece día tras día.
-“Estas semanas han sido de gran fiesta” – apuntó el pastor Daniel Báez – “El Señor obró un milagro y hemos conseguido un local tres veces más grande que el anterior, ubicado frente al templo original y a un coste de renta mensual inferior. ¡En Dios haremos proezas! ¡Éste es un tiempo de evangelización!”
