Confraternice reprocha al Gobierno por no proteger a personas en centros de rehabilitación
Pareciera que al Gobierno mexicano le resulta más fácil que mueran narcotraficantes que tenerlos en un centro de rehabilitación. Ayer domingo, la Confraternidad Nacional de Iglesias Cristianas y Evangélicas (Confraternice) reprochó al gobierno federal, no brindar mayor protección a quienes buscan dejar las drogas e incluso abandonar las filas del narcotráfico.
El presidente nacional de Confraternice, Arturo Farela, lamentó que el gobierno esté más preocupado por canalizar recursos “ilimitados a una guerra de medianos resultados, a una lucha que ya no está legitimada ante la opinión pública y que duele por los daños colaterales”, que los programas de rehabilitación que son necesarios apoyar.
Farela, afirmó al periódico La Jornada que los evangélicos luchan contra la delincuencia con dardos certeros, no con armas. Agregó que añadió que cada cientos de personas que estaban inmersas en las filas del crimen ahora son cristianos que están en proceso de restauración en cientos de centros de rehabilitación evangélicos.
Sin embargo, lamentó que en lo que va del sexenio muchos de estos espacios hayan sido objeto de ataques de la delincuencia en Chihuahua, Ciudad Juárez y Tijuana, y que recientemente hayan sido agredidos empleados de un centro de lavado en Tepic, los cuales asistían a un centro de rehabilitación cristiano evangélico.
“El Gobierno mexicano se había comprometido a brindar protección pero ha sido todo lo contrario. “El gobierno debe escuchar las propuestas ciudadanas para combatir el crimen organizado. La acción de los centros de rehabilitación no cesará”, destacó Farela.
