ISRAEL.- En medio de numerosos informes de conflictos raciales, ataques terroristas, y tensión religiosa, hay algo tangible en el aire en Israel. No es el olor de la pólvora o el sonido de resonancias de sirenas, sino la presencia sobrenatural de Dios.
Recientemente en Israel por primera vez en casi 2.000 años, ocurrió algo milagroso, unas 1.000 personas judías se reunieron en Tel Aviv para escuchar el evangelio de Jesucristo, según publica la revista norteamericana Charisma News.
Esta ha sido la divulgación judía más importante desde el libro de los Hechos. Los asientos se llenaron a capacidad en el evento denominado «Sobrenatural», una conferencia realizada en Tel Aviv y expuesta por el judío convertido a Cristo, Sid Roth.
Sid Roth presentó su testimonio, mientras que un intérprete hablaba ruso a la audiencia que no hablaba inglés. Mientras tanto otro de los organizadores, Joshua Aaron dirigió al pueblo con canciones de adoración en hebreo.
El lugar parecía tranquilo y frío al principio, como una gran resistencia al mensaje. Unas pocas personas estaban molestas, mientras que otros abandonaron el auditorio por un tiempo y luego regresaron.
Estos eventos rara vez se llevan a cabo en Israel. De hecho, la última vez que alguien se levantó y dio su testimonio a muchos judíos a la vez, fue Pedro en el libro de los Hechos.
Aún así Sid Roth comenzó a hablar sobre el amor incondicional de Dios y al ir más profundo en su testimonio, la gente comenzó a responder. Mientras oraba por los asistentes, cientos se pararon afirmando que habían recibido la curación física instantánea. Ellos fueron sanados en sus asientos sin la imposición de manos.
Lo que ellos pensaban que era una conferencia sobre lo sobrenatural se convirtió en una poderosa presentación del Evangelio del reino de Dios.
La Escritura declara que el judío requiere una señal; esto fue evidente al mostrarse el poder de Dios. Y cuando llegó el momento de aceptar a Yeshua (Jesús) el Mesías y Señor. Casi todos en la sala se pusieron de pie e hicieron una oración de arrepentimiento para convertirse a Cristo. Mucha gente incluso se quedó después de la oración individual. Pastores mesiánicos locales harán un seguimiento y discipulado a los que tomaron la decisión de seguir a Jesús.
