Iglesias acusadas de «discriminación» por no aceptar pastores homosexuales
ESCOCIA. – Las iglesias de Glencairn, Moniaive y la de Dunscore, todas en Escocia, se volvieron objeto de críticas tras la decisión de no aceptar como líderes de sus congregaciones a personas homosexuales. Por tal motivo están siendo acusadas de practicar «discriminación» por la orientación sexual.
Estas tres congregaciones tenían en común el liderazgo del mismo pastor. Sin embargo, este se jubiló. Por lo que tuvieron que buscar un nuevo líder, a las iglesias abrieron un proceso de selección para pastores, pero teniendo en cuenta la posibilidad de un futuro líder homosexual.
La congregación de Dunscore se posicionó de forma favorable, mientras que Glencairn y Moniaive discrepaban frontalmente, afirmando que no hay base bíblica para tal decisión, confirmando también a las reglas de la Iglesia de Escocia.
En las redes sociales, algunos internautas se manifestaron criticando la oposición de las iglesias, diciendo que ellas hacen «discriminación» por no aceptar homosexuales como pastores. «Estoy impresionado. Eso es terrible», escribió un seguidor, según el Instituto Cristiano.
Otro dijo que es «absolutamente despreciable que el estado civil de cualquier persona deba ser solicitado al presentar una solicitud de empleo. Es por eso que las iglesias se están vaciando», dijo, sugiriendo que la «brújula moral» de esas iglesias estaría atrasada y que por eso ellas debían» avergonzarse».
Amenaza a la libertad religiosa
Este tipo de situación muestra cómo el discurso en contra de presuntos actos de «discriminación» puede ser utilizado en contra de la libertad religiosa de los cristianos en varios países, pero también en Brasil, teniendo en cuenta que recientemente el Tribunal Supremo Federal (STF, siglas en portugués) formó la mayor parte de la penalización por «homofobia».
A pesar de que la idea de que la predicación religiosa no perjudicará, en la práctica, no es esto lo que sucede, especialmente porque la libertad religiosa no se ejerce sólo dentro de los templos, sino fuera de ellos, en el día a día de los cristianos.
En los Estados Unidos, por ejemplo, la pareja Carl Larsen y Angel, propietarios de la empresa Telescope Media Group, entraron en una batalla legal por sus libertades civiles y religiosas. Ellos fueron acusados de «discriminación» porque se negaron a filmar una ceremonia de «matrimonio gay».
Carl y Angel afirmaron que no podrían hacer ese trabajo, porque eso iba en contra de sus valores cristianos, ya que estarían colaborando para la realización de algo que la Biblia condena.
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