Musulmán se convierte cuando su hijo estuvo a punto de morir

Nínro Ruíz Peña

BIHAR, INDIA. – Noor Alam era un musulmán criminal que ganaba dinero amenazando, matando y torturando a los demás junto con su banda en el estado de Bihar, India. Fue detenido después de cada crimen, pero luego era puesto en libertad por la policía.

Cada vez que Noor era puesto en libertad, él se sentía más seguro, convencido de que Dios estaba con él. En noviembre de 2010, su hijo, Waqar, sufrió un severo dolor de estómago y fiebre. Junto con su esposa, Noor fue a la mezquita para pedir oración con el Imam, el predicador en el culto islámico. Aun así, el estado de salud del niño continuó empeorando.

Desesperado, Noor buscó ayuda en otra parte. Se fue a un líder hindú y también le pagó por el ritual del brujo. Aun así, el estado de salud del niño continuó empeorando.

Un día, Noor decidió tomar a Waqar y se fue al Hospital de Duncan. El niño estaba pálido como un muerto. Noor estaba desesperado porque ya había perdido tres hijos – uno por la fiebre tifoidea, otro por tuberculosis y el tercero por una mordedura de serpiente. Él no estaba dispuesto a perder a Waqar, su último hijo, según publica God Reports.

El médico lo evangelizó

El médico le explicó a Noor que Waqar había sido dañado por un parásito el cual le había causado una hemorragia interna, y poco se podía hacer – el niño estaba a punto de morir. Disgustado, Noor tomó un cuchillo del bolsillo y amenazó al doctor: «Vas a salvar la vida de mi hijo, o te voy a matar», dijo.

El médico miró el cuchillo, pero se mantuvo en calma. «¡No puedo salvar a su hijo! No está en mis manos. Lo siento», le dijo. Noor se dio cuenta de que este hombre no le tenía miedo y que no sabía qué hacer.

«¿Entonces, la vida de mi hijo está en manos de quién? Recé a todos los dioses», dijo Noor. El médico lo miró con gran compasión. «No puedo hacer nada por su hijo, pero sé que alguien que puede: El Señor Jesucristo, oramos a Jesús ahora, si lo desea», sugirió el doctor.

Noor no había oído hablar de Jesús y aceptó. Juntos, se pusieron de rodillas. El médico oró por Waqar como si fuera su propio hijo, como si él lo conocía y lo quería. Noor sintió el poder en su oración y fue tocado profundamente.

«Oramos por sanidad. Ahora tenemos fe en que el Señor va a permitir que esta sanidad ocurra», dijo el médico, después de sacar un pequeño libro de bolsillo. «Lee esto, mi hermano, y usted va a entender más».

Encuentro con Dios

Noor leyó el libro que hablaba de Jesucristo, al lado de la cama del niño. Horas después de haber sido tocado por el mensaje, Noor se dejó caer de rodillas otra vez e hizo una oración sencilla.

«Señor Jesús, tengo fe en que vas a curar a mi hijo. Si lo haces, te voy a seguir con todo mi corazón, y usted será mi Dios. Le pido perdón por las cosas terribles que hice», dijo.

Waqar se recuperó milagrosamente y en una semana estaba de vuelta en casa. Noor Alam estudió con esmero el Nuevo Testamento y comenzó a predicar acerca de Jesús en su comunidad.

Los musulmanes no podían creer lo que había sucedido, pero el testimonio de Noor era irresistible. Su hijo estaba a punto de morir, pero después de un milagro sobrevivió.

Noor Alam llevó a muchos musulmanes a Cristo. Algunos musulmanes lo confrontaron, pero ninguno lo amenazó; su pasado era conocido por todos. Él encontró a un misionero que lo discípuló, y juntos plantaron nuevas iglesias.

En 2012, Noor Alam comenzó a ser conocido como el pastor Noor. Llevó a cientos de personas a Cristo y plantó iglesias en muchas aldeas musulmanas.