Marido de Asia Bibi: “Estamos dispuestos a ir a Italia o EE. UU.”
“Estamos tristes y preocupados. Echamos mucho de menos a Asia, mis hijos lloran y la buscan todos los días. Llevamos una vida de perseguidos, estamos en la mirilla de grupos extremistas, y tememos por nuestras vidas. Estamos listos para ir a Italia o América, después que sea liberada mi esposa”, estas fueron las palabras desesperadas que salieron del corazón de Ashiq Masih, esposo de Asia Bibi, en una entrevista a la exclusiva a la Agencia Fides, gracias a la intervención de “Masih Foundation”, una ONG en Lahore que se ha ocupado de la protección de la familia cristiana de Asia Bibi, en Pakistán.
Ashiq Masih, el marido de Asia Bibi, al cual hemos llegado en Lahore gracias a la la ONG que se ocupan de la protección de la familia de Asia Bibi y está prestando asistencia jurídica a la mujer.
“Estamos muy preocupados por esta historia absurda. Echamos mucho de menos a Asia, sobre todo los 4 niños (también una quinta hija la cual está casada) la extrañan tanto: lloran y preguntan todos los días por su madre, quieren que regrese a casa. La Fundación Masih se ocupado de nosotros, les damos las gracias por su apoyo”, resaltó Ashiq.
El esposo de Asia Bibi, destacó que ella está muy triste por su familia, pero Gracias a la Fundación Masih están realizando los trámites legales para que sea liberada. Aunque el presidente de Pakistán y el mismo gobierno reconocen la inocencia de Asia Bibi y quieren liberarla, sin embargo, han sido amenazados de grupos extremistas islámicos, quienes han jurado que si liberan a Asia Bibi, la matarán o incendiarán Pakistán.
“Gracias a la Fundación Masih, estamos realizando todos los pasos necesarios a nivel legal para seguir el caso de Asia y para nuestra protección. El Presidente y el gobierno se han interesado en nuestro caso, han comprendido que Asia es inocente y han expresado su preocupación, pero están bajo la presión de grupos extremistas islámicos. Vamos a actuar conforme a la ley, vamos a seguir adelante con el proceso.
“Muchos militantes islámicos radicales nos amenazan, otros muchos nos están buscando. Vivimos en un lugar seguro, pero en constante temor por nuestras vidas. Si tenemos la oportunidad de trasladarnos a Italia o Estados Unidos, lo haremos sin demora. Hoy estamos muy preocupados por la educación de los niños y por su vida futura.
