El astro brasileño Kaká telefoneó a Brasil para saber si algún familiar se encuentra entre las víctimas del derrumbe de un templo evangélico en el que murieron nueve personas y más de 120 resultaron heridas. Kaká contrajo matrimonio en el templo de la iglesia Renascer en Cristo de la ciudad de San Pablo, donde ocurrió la tragedia.
Según un asesor de Kaká, ninguno de sus familiares se encuentra entre las víctimas del accidente, informó el sitio Folha on line.
El astro del Milan acompañó con preocupación las informaciones del derrumbe, agregó su oficina de prensa.
Las autoridades iniciaron una investigación sobre las causas del derrumbe y vecinos dijeron a la prensa que se trató de «una tragedia anunciada» pues habían avisado hace más de un años sobre los fisuras en el predio.
Kaká ha declarado que pretende ser pastor evangélico cuando deje el fútbol profesional.
El jugador abrazó con más intensidad los principios de ese grupo religioso tras sufrir un serio accidente en la columna en 2000.
También el padre del jugador, Bosco Leite, pertenece a la Iglesia Renascer, corriente neopentecostal que fue fundada en 1986 por un ex gerente de marketing de la empresa Xerox, que es responsable de más de mil templos y una cadena de canales de televisión y radio.
