Diez niños, entre ellos seis bebés, fueron apartados el martes de una huelga de hambre en la que acompañaban a sus madres, quienes demandaban mejoras en un programa de empleo en la comuna sureña de Talcahuano, informó el alcalde de la ciudad.
El grupo de 23 mujeres protestaba desde el lunes por la tardanza en la entrega de insumos para la confección de prendas en el taller comunal y por el incumplimiento en el pago de un bono de 80 dólares por parte del municipio de Talcahuano (521 Km.al sur de Santiago).
El alcalde, Gastón Saavedra, acompañado por autoridades del Servicio Nacional de Menores, interpuso una medida de protección judicial y solicitó el traslado de los niños con algún familiar o a un hogar de protección.
«Lo que no queremos es que (los niños) continúen siendo utilizados de un modo irracional y sin un objetivo claro», señaló Saavedra. Los menores recibieron atención de las autoridades sanitarias.
Según informaron los medios locales, las madres mantenían a sus niños consumiendo líquidos pero los lactantes sí fueron amamantados. Algunos de ellos presentaban molestias respiratorias.
Los menores y sus progenitoras permanecían en una iglesia evangélica. La dirigenta Golda Córdova aseguró que sólo las «acompañaban» y que el martes sí recibieron sus alimentos normalmente. A pesar de que debieron entregar a sus hijos, ellas mantendrán su medida de protesta.
El alcalde explicó que los retrasos en la entrega de recursos se debe a presuntas irregularidades detectadas en la administración de los mismos.
Univisión
