¿Por qué es importante el judaísmo de Jesús?
NOTICIACRISTIANA.COM.- De alguna manera, en los tiempos modernos, el mundo ha identificado al cristianismo como una “religión occidental”. Sin embargo, esta es una declaración terriblemente incorrecta.
Sí, muchas personas siguen a Jesús en el hemisferio occidental, sin embargo, las raíces y el comienzo del movimiento del cristianismo después de Jesús comenzaron en Jerusalén, Judea, Samaria y hasta los confines de la tierra. ( Mateo 28:19-20 , Marcos 26:15 y Hechos 1:8 )
Dentro de este plan de desarrollo de Dios, era importante que el Salvador viniera de una línea judía. Hoy vamos a sumergirnos en por qué fue significativo que Jesús fuera judío.
¿Por qué Jesús era judío?
Quizás se pregunte por qué la genealogía de Jesús era importante. Era vital que Jesús fuera judío porque Dios dijo que el Mesías vendría de una línea judía específica.
Recientemente, me preguntaron qué significa cuando los cristianos usan la palabra “pacto”. La joven se confundió con el término cuando lo escuchó en un servicio de la iglesia.
Usé un ejemplo al explicar un pacto como un acto que involucra a Dios en algo así como un matrimonio donde las personas entran en una relación de pacto con un cónyuge y el Señor.
Hay una promesa, pero más que un compromiso, hay un acuerdo reverente y vinculante entre dos personas y el Señor bendiciendo su matrimonio. Sin embargo, esto es solo un pequeño vistazo del pacto.
De hecho, el Señor mismo fue quien creó la idea al hacer el primer pacto con Noé, después del diluvio con un arco iris como símbolo y finalmente ese Nuevo Pacto, a través de Jesús.
Paul R. Williamson de The Gospel Coalition define el pacto como: «Los pactos bíblicos forman el hilo unificador de la acción salvadora de Dios a través de las Escrituras, comenzando explícitamente con Noé y alcanzando su cumplimiento en el nuevo pacto ratificado a través de la sangre de Jesucristo».
Williamson continúa explicando que aunque la primera mención de la palabra pacto está en Génesis 6:18 con Noé, algunos creen que el concepto se ve tres veces antes.
Dicen que se ve dentro de la Trinidad, Dios y Adán con el trabajo y la creación, y después de la caída cuando Dios hace un pacto para rescatar a la humanidad.
Usted podría estar pensando, ¿cómo se relaciona esto con el hecho de que Jesús sea judío? La Escritura es un gran libro formado por muchos más pequeños.
Desde el principio, Dios Trinidad, tenía un plan para traer a la humanidad de regreso a Sí mismo. Sabía el momento en que Jesús vendría a la tierra y viviría y moriría por nosotros.
Sabía el tiempo señalado. Él sabe lo que está haciendo hoy, en este mismo momento. En el momento en que Adán y Eva fueron expulsados del jardín, Dios sabía que enviaría a Jesús muchos años después.
El Antiguo Testamento es todas las obras de Dios que apuntan a la venida de Jesús al mundo. La Biblia está llena de profecías y promesas hechas a las personas que el Señor apartó como Su pueblo especial.
Quizás estés pensando que esto es exclusivo, sin embargo, recuerda que Dios no muestra favoritismo.
La fidelidad de Dios impulsa la confianza eterna para judíos y gentiles por igual
Es un gran alivio cuando alguien hace una promesa y la cumple. Vemos la fidelidad de Dios revelada en el hecho de que Jesús era judío.
Él hizo el pacto años atrás y se cumplió a través de Cristo. Esto fortalece nuestra confianza en nuestro gran Dios. Cuando dice que va a hacer algo, lo hace.
Esto fortalece nuestra confianza en nuestro gran Dios. Cuando dice que va a hacer algo, lo hace.
El Señor nunca peca, por lo que nunca miente ni hace un pacto que no puede cumplir. Lo hermoso de esto es que podemos acercarnos a Él con plena confianza en nuestra salvación a través de Jesús.
Cuando dijo que se había cumplido, podemos saber que tenemos vida eterna.
1 Juan 5:11-13 dice: “Y este es el testimonio: Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en Su Hijo. Quien tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida. Os he escrito estas cosas a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna”.
Aunque Jesús era judío, deja 100% claro que Dios está injertando personas de todas las naciones que creen en Él. ( Juan 15:1-8 , Romanos 1:16 , Romanos 11:11-31 ). De hecho, el último mandato de Jesús fue hacer discípulos a todas las naciones, (Mateo 28:19-20).
A medida que miramos a lo largo de la genealogía de Jesús, hubo personas como Rut y Raab injertadas a pesar de que no eran de etnia judía.
La importancia de que Jesús fuera judío no era para excluir al resto del mundo, sino para resaltar el plan redentor y preciso de Dios. Esto fue revelado a los discípulos originales con la esperanza de que todo el mundo escuche el mensaje del evangelio y se convierta en discípulos de Cristo.
Artículo escrito por Emma Danzey en la página Crosswalk.
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