En la ciudad iraní de Kermanshah algunas personas fueron declaradas culpables por no haber participado en el mes sagrado del Ramadán, periodo sagrado para los musulmanes que ayunan durante 40 días.
Entre los condenados está un cristiano a quien le quemaron los labios con un cigarro en una plaza pública por rehusarse a ayunar, según publica el Daily Mail.
Sin embargo, el cristiano no fue el único, cinco musulmanes también fueron condenados en la ciudad por no haberse abstenido de alimentos. La sentencia para ellos fue de 70 latigazos en público.
El Consejo Nacional de Resistencia de Irán, un grupo político contrario al gobierno, está en contra de estas sentencias y castigos considerados «salvajes» según publica en una entrevista el periódico británico.
«Existe un silencio por parte de la comunidad mundial, principalmente de los países occidentales, no hacen nada frente a estos castigos medievales bajo la excusa de que las conversaciones nucleares con Irán intensificaran la violación brutal y sistemática de los derechos humanos en Irán», dijo el portavoz del grupo.
Las minorías religiosas de Irán son perseguidas, la población total del país es 76 millones de personas, sólo 250 mil afirman ser cristianos. La forma en que las minorías son tratadas en el país llegó a preocupar a las Naciones Unidas en marzo, la cual envió un informe sobre el tema.
La legislación iraní autoriza la tortura, el encarcelamiento e incluso la pena de muerte para aquellos que no siguen el Islam, el castigo contra este cristiano y los otros cinco musulmanes que no ayunaron en el Ramadán muestra bien cómo funciona la ley en Irán.
Traducido y adaptado por NoticiaCristiana.com
