El día de ayer finalmente fue firmado el acuerdo nuclear con Irán. Durante semanas el grupo liderado por los Estados Unidos, además de cuatro miembros de facultades del Consejo de Seguridad de la ONU (Rusia, China, Francia y el Reino Unido), con la participación de Alemania, retiraron las sanciones económicas que afectaron principalmente al comercio de petróleo iraní.
De este modo, el programa nuclear de Irán será «restringido» por más de una década, bajo supervisión de la ONU. Esto no significa que al país se le impedirá el desarrollo de armas nucleares.
La expectativa es que hay una inyección en la economía local de los miles de millones de dólares, lo que mejora significativamente la vida de los ciudadanos iraníes. El presidente Barak Obama, admite que el acuerdo «no se basa en la confianza, sino en la capacidad de verificación».
Por su parte, el presidente Hassan Rouhani, dijo en un discurso ayer que Irán no quiere crear una bomba atómica. Los analistas, sin embargo, creen que con la última vigencia de los contratos (10 años), los iraníes pueden reanudar completamente su programa nuclear.
Israel cree que los millones de dólares que el régimen iraní va a ganar a partir de ahora serán utilizados para aumentar el terrorismo en el mundo. El objetivo principal sería el apoyo a Hezbolá, visto como un enemigo por Israel y Arabia Saudita. Las Naciones Unidas reconocen que hay un programa nuclear iraní, pero que se centraría a partir de ahora en fines civiles, como la generación de energía.
El gobierno de Obama se esforzó mucho para firmar el acuerdo acreditando que el gobierno de Rouhani es «moderado». Aun así, la prensa estadounidense informó ampliamente de que los EE.UU. todavía son considerados patrocinadores del terrorismo de Irán.
En su discurso oficial al comentar sobre el acuerdo, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó de «error histórico» el acuerdo nuclear alcanzado entre Irán y las grandes potencias en Viena.
“Según los primeros elementos a los que hemos tenido acceso, ya se puede decir que este acuerdo es un error histórico para el mundo», declaró Netanyahu antes de un encuentro en Jerusalén con el ministro de Relaciones Exteriores holandés, Bert Koenders.
Gracias a este acuerdo, que quiere impedir que Teherán arme una bomba atómica, «Irán recibirá cientos de miles de millones de dólares que le permitirán hacer funcionar su máquina del terror, su agresión y su expansión en Oriente Medio y en el mundo», acusó Netanyahu.
Dejó claro que «nos comprometemos de impedir que Irán obtenga armas nucleares y ese compromiso se mantiene». El primer ministro israelí recordó que la semana pasada hubo manifestaciones por el «Día de Jerusalén». Miles de musulmanes salieron a las calles en Irán y otros países musulmanes, con pancartas y carteles que pedían «Muerte a Estados Unidos» y «Muerte a Israel».
Los sitios de noticias informan que este año Hassan Rouhani, no apareció en público, pero afirmaron que no podía dejar de expresar «su descontento con el régimen sionista [de Israel] y las fuerzas terroristas».
El diario The Jerusalem Post informa que el ayatolá Mohammad Taqi Vaezi, miembro de la Asamblea de Especialistas de Irán, fue visto gritando «Muerte al régimen sionista» y acusando a los israelíes de «agresión».
Para muchos teólogos expertos en profecía bíblica, el escenario que se dibuja en el mundo actual se compara con el texto de Ezequiel 38-39, que la Biblia describe como la Guerra de Gog y Magog
Habrá grandes naciones del mundo unidos en la batalla contra Israel:
1 – Una federación de diez reinos, que es un importante imperio mundial.
2 – La federación del Norte, (Rusia y sus aliados, como Turquía).
3 – Los reyes de Oriente, la gente más allá del Éufrates (Irán).
4 – El rey del Sur, potencia o coalición de potencias del Norte de África (Egipto y Sudán).
Un video de una profecía 2011, del pastor keniano David Owuor a menudo se comparte en las redes sociales.
Con información de Haaretz, Estado de Israel y El País
