EE.UU.- El presidente de la de Estados Unidos , Donald Trump, reconoció oficialmente este miércoles (6) a Jerusalén como la capital de Jerusalén y pidió al Departamento de Estado iniciar el proceso de cambio de la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén.
«Mi anuncio marca el comienzo de un nuevo enfoque en el conflicto entre Israel y los palestinos, hoy reconocemos lo obvio», dijo Trump en un discurso pronunciado en la Casa Blanca. Según el presidente estadounidense, Jerusalén debe seguir siendo el lugar sagrado y lugar de culto de judíos, musulmanes y cristianos. Trump también pidió calma y moderación, para que el orden prevalezca sobre el odio.
El anuncio se produce un día después de varias advertencias de la comunidad internacional, ya que los palestinos buscan tener el este de Jerusalén como capital de su futuro estado. La ciudad, sin embargo, fue anexada por Israel durante la Guerra de los Seis Días, en 1967, y pasó a ser considerada su capital indivisible.
Con el anuncio, Trump cumple una ley que prevé el reconocimiento de Jerusalén como capital, adoptada por el Congreso Americano en 1995. La aplicación de la ley venía siendo aplazada en las últimas dos décadas, bajo la justificación de «intereses de seguridad nacional». «Después de más de dos décadas de aplazamiento, no estamos más cerca de un acuerdo de paz duradero», dijo el presidente.
El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu consideró el anuncio hecho por Trump un «hito histórico». El primer ministro afirmó que cualquier acuerdo de paz con los palestinos debe incluir a Jerusalén como la capital de Israel y ha pedido que otros países sigan a Estados Unidos en la decisión de trasladar sus embajadas a Jerusalén.
Reacciones
Según un anuncio de la organización palestina Hamas, la decisión de Trump abre «las puertas del infierno». Países como Francia, Turquía y Egipto rechazaron la decisión de Trump.
El presidente estadounidense pasó el día el martes llamando a varios líderes árabes para decir que tenía la intención de trasladar la embajada estadounidense en Israel a Jerusalén. En respuesta, el presidente palestino Mahmud Abás «alertó sobre las consecuencias peligrosas que tal decisión tendría en el proceso de paz y también para la paz, la seguridad y la estabilidad en la región y en el mundo», y también pidió que el Papa Francisco, Rusia, Francia y Jordania intervinieran en cuestión.
El presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, alertó a Trump contra «medidas que perjudiquen las posibilidades de paz en Oriente Medio». El rey de Jordania, Abdullah II, advirtió a Trump que tal medida tendría «graves consecuencias en la estabilidad y seguridad de la región» e impediría los esfuerzos norteamericanos de reanudar las negociaciones de paz entre palestinos e israelíes, según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores jordano.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, amenazó con romper las relaciones diplomáticas con Israel si el gobierno estadounidense trasladara su representación diplomática. «Señor Trump, Jerusalén es una línea roja para los musulmanes. Es una violación de la ley internacional tomar una decisión apoyando a Israel mientras las heridas de la sociedad palestina todavía están sangrando», dijo Erdogan.
[ Fuente: G1 ]
