Visión Nacional para la Conciencia Cristiana (VINACC) emitió un llamado a la sociedad brasileña contra la aprobación de varios proyectos de Ley que están en tramitación en el Congreso Nacional. Se plantean como un freno a la homofobia, pero entiende VINACC que servirán para introducir una censura y limitación de las libertades individuales y colectivas de manifestación de posiciones que proclaman como moralmente incorrecta la práctica homosexual.
“Al afirmar que toda manifestación contraria a la práctica homosexual –incluyendo aquí sermones y textos bíblicos que se posicionan como contrarios a las prácticas homosexuales– constituyen un crimen de homofobia –esto es, violencia contra los homosexuales– el proyecto establecerá en Brasil el más terrible tipo de legislación penal, típica de Estados totalitarios, los Crímenes de Mera Opinión”, explica la VINACC.
El manifiesto de Visión promueve la colecta de firmas para ser remitidas a los poderes políticos y sociales del país, pidiendo la no aprobación de esos proyectos, ya que criminalizan “toda manifestación contraria a la práctica homosexual, frenando el derecho fundamental que cada ciudadano tiene de, libremente, manifestarse, expresarse y opinar sobre cualquier tipo de conducta moral o tema social”.
Si los mencionados proyectos de Ley no tuviesen ese carácter de aplicar la naturaleza criminal a las posturas morales, la VINACC los apoyaría, pues también ella se declara contraria a cualquier tipo de violencia (incluyendo la condena a la violencia contra las personas de orientación homosexual).
BIBLIA Y LEY
El manifiesto de la VINACC enfatiza que la Biblia es la única regla de fe y conducta, y que el texto sagrado considera desde su punto de vista la práctica homosexual como pecado, de la misma forma que otros tipos de pecado, como la prostitución, el adulterio, el incesto, la maledicencia, el homicidio, la idolatría, etc.
La VINACC convoca a los poderes políticos y sociales constituidos a unirse contra esos proyectos, ya que por todo lo expuesto “restringen, de modo absoluto, derechos y garantías fundamentales del ser humano y de la sociedad en general”, además de cercenar el derecho constitucional de libertad de conciencia, creencia y culto.
El texto de VINACC recuerda que todos los ciudadanos son iguales delante de la ley y pide que “no haya ningún tipo de discriminación promovida por el propio Estado”.
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