Llevarse bien con todas las personas y ayudarlas a superarse son algunas de las cualidades del buen liderazgo, según expresó ayer el motivador John C. Maxwell, al lanzar oficialmente el proyecto Un millón de líderes.
El programa, que se inició formalmente ayer para toda Latinoamérica, tiene el objetivo de formar en tres años un millón de nuevos líderes cristianos en toda la región, y se escogió a Guatemala para su lanzamiento.
La meta para el país es formar a 50 mil líderes. Se iniciará con la capacitación de unos dos mil pastores, quienes deberán, a su vez, durante estos tres años, capacitar a 25 personas más cada uno.
“El ejemplo que brinden estos líderes no se quedará dentro de una iglesia, sino que se proyectará a toda la sociedad, pues al poner en práctica esos principios, otras personas querrán seguirlos”, aseguró el motivador.
Maxwell es autor de 25 libros y conferencista de liderazgo sobre principios cristianos. Fundó el ministerio de EQUIP en 1997.
También es asesor de liderazgo en el Pentágono, la Central de Inteligencia Americana (CIA) y la academia militar West Point, entre otras entidades.
Conferencia
“Me ayudará mucho, no sólo para el trato con las personas que me rodean, sino para saber que tengo muchas actitudes que debo cambiar”, indicó Mario Enríquez, una de las miles de personas que asistieron anoche al auditorio de Fraternidad Cristiana para escuchar su mensaje.
Con un poco de desilusión, mucha gente se conformó con verlo a través de pantallas gigantes ubicadas en un salón contiguo, pues quedó abarrotado el local.
Las personas que están cerca de mí me ayudan a hacer o me destruyen. Por eso debo enseñarles a trabajar en equipo, ayudarles a mejorar en su vida diaria, dijo Maxwell a la multitud.
Otro de conferencista fue Marcos Witt, fundador de Lidere, organización cristiana que promueve en Iberoamérica una cultura de liderazgo, indicó con preocupación que la tendencia en Latinoamérica es a un liderazgo autoritario, despótico y dictatorial, en el cual la persona piensa en sí misma y no en los demás, lo cual consideró negativo.
Principios: Las cualidades
El buen líder debe ser:
El que quita obstáculos a los demás.
El que piensa en los demás y no en sí mismo.
El que ayuda a desarrollar capacidades en otros para cumplir metas.
El que sueña con un mañana mejor.
El que es fiel a Dios y a sus principios.
El que entiende que autoridad no es abusar de los demás.
El que no habla de sus metas, sino en cómo ayudar a los demás a alcanzar las suyas.
El que pregunta: ¿Qué puedo hacer por ti?
El que sabe que no tiene derecho a estar poniendo prohibiciones a los demás.
Prensa Libre
