NOTICIACRISTIANA.COM.- La pareja de Travis y Rachel, fueron testigos sobre cómo la mano protectora de Dios siempre está ahí a pesar de las circunstancias.

El 24 de mayo de 2023 ocurrió un incendio en el primer piso de su apartamento de dos plantas.

Rachel despertó a su pareja cuando se percató del humo generado por el fuego.

Los padres de Rachel, quienes estaban afuera, alertaron a la pareja sobre el incendio.

En ese momento sabían que su única opción era salir por la ventana que tenía una distancia entre 15 y 20 pies de la entrada.

Rachel, quien estaba embarazada, tuvo que saltar por la ventana, luego Travis ayudó a su perro a hacer lo mismo, sin embargo, quedó atrapado por las llamas.

“Fue entonces cuando decidí que iba a correr hacia abajo y atravesar el fuego. Recuerdo gritar y correr por el granero porque básicamente podía sentirme golpeando las llamas mientras corría”, dijo Travis a la cadena CBN.

Cuerpo quemado

Travis atravesó las llamas y salió por la ventana, su piel ardía, sin embargo, no era lo que más le preocupaba, ya que vio a su esposa inconsciente mientras sus padres la alejaban del fuego.

El hombre cuenta que corrió hacia la casa de sus padres adyacente al granero para bañarse con agua fría.

Travis vio que tenía sus manos quemadas y que sus piernas estaban bastante golpeadas, y en cuanto pudo, le clamó a Dios que protegiera a su esposa.

Hospital

Rachel fue atendida por los médicos, quienes indicaron que tenía un derrame cerebral debido a una fractura craneal, y además presentaba una quemadura de tercer grado, que iba desde sus piernas hasta el torso.

Sin embargo, los médicos le practicaron una cesárea para poderle salvar la vida a su bebé de 36 semanas.

Travis también tuvo que ser operado, ya que tenía grandes quemaduras por todo su cuerpo.

Los familiares de la pareja contactaron a sus iglesias para pedir oraciones.

Dios de milagros

Rachel dio a luz con éxito a su hija Brynlee, la niña nació completamente sana y saludable, también los médicos lograron parar su hemorragia.

Travis contó que él y su esposa alabaron a Dios tras reconocer el milagro que hizo por ellos.

Sin embargo, no todo fue bueno, ya que tuvieron que atravesar por una recuperación dolorosa.

Travis se sometió a tres cirugías, mientras que Rachel tuvo cinco. Requirió fisioterapia debido a la ubicación y a la extensión de sus quemaduras, pero ellos y otros continuaron orando.

“Dios es el sanador supremo y nos lo ha demostrado desde el primer día”, dijo Rachel. “Cuando salí del hospital, estuve allí veintinueve días y uno de mis cirujanos me dijo que mi curación estaba donde debería estar a los cuatro meses y medio. Fue una lección de humildad escuchar eso”.

Por su parte, Travis explica que su familia recibió un milagro de Dios y que este incidente le abrió los ojos sobre cuan importante es la oración.

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