El lateral brasileño anotó ante el Celta su primer gol como madridista, que además supuso el 1-2 definitivo que daba la victoria a los blancos. Un tanto especial que Cicinho celebraba mirando al cielo, dedicándoselo a Dios “haber querido que tenga esa luz para jugar en este equipo”.
“Estoy muy feliz por haber marcado mi primer gol con la camiseta del Real Madrid. En la celebración he mirado al cielo y se lo he dedicado a Dios porque él ha querido que yo tenga esa luz para jugar en el Real Madrid”.
Cicinho, que profesa la fe evangélica (como otros muchos jugadores brasileños) explica que “En la liga española se sufre en todos los partidos, y este no ha sido una excepción. Ha sido un choque muy difícil para todos los jugadores. Sabíamos que ellos nos lo intentarían poner complicado. En un contraataque salimos rápido y conseguimos marcar”.
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