NOTICIACRISTIANA.COM- El Antiguo Testamento, es una colección de libros sagrados, que revelan el plan de Dios para la humanidad, y su relación con su pueblo elegido, Israel.
Entre sus muchos temas, uno de los más importantes, es la profecía mesiánica; es decir, la predicción de la venida de un salvador, que restauraría el reino de Dios, y traería paz y justicia al mundo.
Los profetas del Antiguo Testamento, anunciaron la llegada de este Mesías, con detalles sorprendentes, desde su origen familiar, hasta su lugar de nacimiento, pasando por su ministerio, su muerte y su resurrección.
Estas profecías se cumplieron de manera asombrosa, en la persona de Jesucristo, el Hijo de Dios hecho hombre, que nació de una virgen, vivió una vida sin pecado, murió en la cruz, y resucitó al tercer día.
Veamos algunas de estas profecías del Antiguo Testamento, y cómo se realizaron en el Nuevo Testamento.
- El Mesías sería descendiente de David. Dios le prometió al rey David, que de su descendencia saldría un rey, que reinaría para siempre (2 Samuel 7:12-13). El Nuevo Testamento muestra, que Jesús era de la línea de David, tanto por parte de su padre terrenal, José, como de su madre, María (Mateo 1:1; Lucas 3:23-31).
- El Mesías nacería de una virgen. El profeta Isaías, anunció que una señal de la intervención divina, sería el nacimiento milagroso de un niño, de una virgen, que se llamaría Emanuel, que significa “Dios con nosotros” (Isaías 7:14). El Nuevo Testamento, relata que el ángel Gabriel, le dijo a María que concebiría, por el poder del Espíritu Santo, y que daría a luz al Hijo de Dios (Lucas 1:26-38).
- El Mesías nacería en Belén. El profeta Miqueas, predijo que de la pequeña ciudad de Belén, saldría el gobernante de Israel, cuyo origen era desde la antigüedad, (Miqueas 5:2). El Nuevo Testamento, narra que Jesús nació en Belén, cumpliendo así la profecía (Mateo 2:1-6).
- El Mesías sería llamado Nazareno. El profeta Isaías se refirió al Mesías como el Renuevo, una palabra que en hebreo se dice “netzer” y que significa brote o retoño (Isaías 11:1). El Nuevo Testamento cuenta que Jesús creció en Nazaret, una ciudad cuyo nombre deriva de la misma raíz que “netzer” (Mateo 2:23).
- El Mesías sería ungido, por el Espíritu Santo. El profeta Isaías describió al Mesías, como el Siervo de Dios, que tendría el Espíritu de Dios sobre él, y que traería justicia a las naciones (Isaías 42:1). El Nuevo Testamento, registra que Jesús fue bautizado, por Juan el Bautista, y que el Espíritu Santo descendió sobre él, en forma de paloma (Mateo 3:13-17).
- El Mesías haría milagros. El profeta Isaías, anunció que el Mesías sanaría a los enfermos, daría vista a los ciegos, oído a los sordos, y libertad a los cautivos (Isaías 35:5-6; 61:1). El Nuevo Testamento relata, que Jesús hizo todo esto y mucho más, demostrando su poder y su compasión, (Mateo 4:23-25; 9:35; 11:4-5).
- El Mesías moriría por los pecados del pueblo. El profeta Isaías presentó al Mesías, como el Cordero de Dios, que llevaría el pecado de muchos, y que sería traspasado, molido y afligido por nuestra rebelión (Isaías 53:4-12). El Nuevo Testamento declara, que Jesús murió en la cruz, llevando el castigo que nos correspondía, y dándonos la salvación por su gracia (Juan 1:29; 1 Pedro 2:24; 3:18).
Estas son solo algunas de las muchas profecías, del Antiguo Testamento, que se cumplieron en Jesús. Él es el Mesías prometido, el Hijo de Dios, el Salvador del mundo. ¿Le has recibido en tu corazón? Él te ama y te espera con los brazos abiertos.
Artículo por: Bible Study Tools
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